JOEL.- Volví para jurar que iba intentar superar mi humillación, creo.
CLEMENTINE.- ¿Fue algo que yo dije?
JOEL.- Si... Dijiste entonces vete! Con tanta distancia... Sabes... 
CLEMENTINE.- Oh, lo siento mucho!
JOEL.- No importa...
CLEMENTINE.- Joeli... ¿Y si te quedas esta vez?
JOEL.- Ya salí por la puerta, no me queda ni un recuerdo.
CLEMENTINE.- Vuelve y has una despedida por lo menos... Vamos a fingir que tuvimos un Adiós Joel...
JOEL.- Te amo.

No quería ser la tercera en tu lista, ni la primera, ni ningún número que puedas contar. Quería ser yo, simplemente, que no tengas que recurrir a una lista para saber en que puesto estoy. Quería que al pensar en mi se te olvidaran todas las listas, todos los números, y todo lo que no me involucrara. 

- ¿Tan profundamente me desprecias?



- No, me desprecio a mí mismo...



- ¿Por qué?



- Por haberme permitido amarte. 
Y tú eres una de esas 
Que decidió que le rompieran el corazón

PORQUE NI TÚ MISMA
PUEDES MANDAR EN TU CORAZÓN.



        No fuiste justo, nunca estuviste.
        Tú lo eras todo, pero eso no es justo.
        Yo te di la vida, yo te di todo.
       Tú no existes, TÚ ME DEJASTE CAER.

¿Qué decís que no vas a mentir?
Si te encanta.

« ¡Síguelo!», gritaron cuerpo y alma a la par.
Pero tuve miedo de amar con locura,
De abrir mis heridas que suelen sangrar,
Y no obstante toda mi sed de ternura,
Cerrando los ojos, lo dejé pasar.



Cobardía.

Querido Noah:
Escribo estas líneas a la luz de las velas, mientras tú duermes en la habitación que hemos compartido desde el día de nuestra boda. Aunque no alcanzo a oír tu respiración, sé que estás ahí, y que pronto me acostaré a tu lado, como siempre. Sentiré tu calor, el bendito consuelo de tu proximidad, y tu respiración me guiará lentamente hasta el lugar donde sueño contigo, con lo maravilloso que eres.
La llama de la vela me recuerda a un fuego del pasado, que contemplé vestida con tu camisa y tus vaqueros. Entonces ya sabía que estaríamos juntos para siempre, aunque al día siguiente titubeara. Un poeta sureño me había capturado, robándome el corazón, y en lo más profundo de mi ser, supe que siempre había sido tuya. ¿Quién era yo para cuestionar un amor que cabalgaba sobre las estrellas fugaces y rugía como las olas del mar? Así era entonces, y así es ahora.
Recuerdo que al día siguiente, el día de la visita de mi madre, volví contigo. Estaba asustada, como nunca en mi vida, porque temía que no me perdonaras que te hubiera dejado. Cuando bajé del coche, temblaba, pero tú sonreíste y me extendiste los brazos, ahuyentando todos mis temores. "¿Te apetece un café?", dijiste simplemente. Y nunca volviste a sacar el tema. Ni una sola vez en todos los años que hemos vivido juntos.
Tampoco protestabas cuando, en los días siguientes, salía a caminar sola. Y si regresaba con lágrimas en los ojos, siempre sabías cuándo debías abrazarme y cuándo dejarme sola. No sé cómo lo sabías, pero lo hacías, y con ello me facilitaste las cosas. Más adelante, cuando fuimos a la pequeña capilla e intercambiamos anillos y votos, te miré a los ojos y comprendí que había tomado la decisión correcta. Más aún, comprendí que era una tonta por haber dudado. Desde entonces, no me he arrepentido ni una sola vez.

Nuestra convivencia ha sido maravillosa, y ahora pienso mucho en ella. A veces cierro los ojos y te veo con hebras de plata en la cabeza, sentado en el porche, tocando la guitarra, rodeado de niños que juegan y baten palmas al ritmo de la música que has creado. Tu ropa está sucia después de una jornada de trabajo, y estás agotado, pero aunque te sugiero que descanses un poco, sonríes y dices: "Es lo que estoy haciendo ". Tu amor por los niños me parece sensual y apasionante. "Eres mejor padre de lo que crees", te digo más tarde, cuando los niños duermen. Poco después, nos desnudamos, nos besamos y estamos a punto de perder la cabeza antes de meternos entre las sábanas de franela.
Te quiero por muchas razones, pero sobre todo por tus pasiones, que siempre han sido las cosas más maravillosas de la vida. El amor, la poesía, la paternidad, la amistad, la belleza y la naturaleza. Y me alegro de que hayas inculcado esos sentimientos a nuestros hijos, porque sin lugar a dudas enriquecerán sus vidas. Siempre hablan de cuánto significas para ellos, y entonces me siento la mujer más afortunada del mundo.

También a mí me has enseñado muchas cosas, me has inspirado, y nunca sabrás cuánto significó para mí que me animaras a pintar. Ahora mis obras están en museos y colecciones privadas de todo el mundo, y aunque muchas veces me he sentido cansada o aturdida por exposiciones y críticos, tú siempre me alentabas con palabras amables.
Comprendiste que necesitaba un estudio, un espacio propio, y no te preocupabas por las manchas de pintura en mi ropa, en mi pelo o incluso en los muebles. Sé que no fue fácil. Sólo un hombre de verdad puede soportar algo así. Y tú lo eres. Lo has sido durante cuarenta y cinco maravillosos años.

Además de mi amante, eres mi mejor amigo, y no sabría decir qué faceta de ti me gusta más. Adoro las dos, como he adorado nuestra vida en común. Tú tienes algo, Noah, algo maravilloso y poderoso. Cuando te miro veo bondad, lo mismo que todo el mundo ve en ti. Bondad. Eres el hombre más indulgente y sereno que he conocido. Dios está contigo. Tiene que estarlo, porque eres lo más parecido a un ángel que he visto en mi vida.
Sé que me tomaste por loca cuando te pedí que escribieras nuestra historia antes de marcharnos de casa, pero tengo mis razones, y agradezco tu paciencia. Y aunque nunca respondía tus preguntas, creo que ya es hora de que sepas la verdad.
Hemos tenido una vida que la mayoría de las parejas no conocerá nunca, y sin embargo, cada vez que te miro, siento miedo porque sé que todo acabará muy pronto. Los dos conocemos el diagnóstico de mi enfermedad y sabemos lo que significa. Te veo llorar, y me preocupo más por ti que por mí, porque sé que compartirás mis sufrimientos. No encuentro palabras para expresar mi dolor.
Te quiero tanto, tan apasionadamente, que hallaré una forma de volver a ti a pesar de mi enfermedad. Te lo prometo. Y por eso te he pedido que escribieras nuestra historia. Cuando esté sola y perdida, léemela —tal como se la contaste a nuestros hijos— y sé que de algún modo comprenderé que habla de nosotros. Entonces, quizá, sólo quizá, encontremos la manera de estar juntos otra vez.
Por favor, no te enfades conmigo los días en que no te reconozca. Los dos sabemos que llegarán. Piensa que te quiero, que siempre te querré, y que ocurra lo que ocurra, habré tenido la mejor vida posible. Una vida contigo.
Si has conservado esta carta y la relees, cree que lo que digo vale también ahora. Noah, dondequiera que estés y cuando quiera que leas esto, te quiero. Te quiero mientras escribo estas líneas, y te querré cuando las leas. Y lamentaré no poder decírtelo en persona. Te quiero con toda el alma, marido mío. Eres, y has sido, lo que siempre he soñado.
Allie.

La loca de mierda


Qué lindo el lago, el parque... ¿Qué tal? Sí, estoy hablando sola, si. (Viene el verano, termina otro año... Está bien que quiera cambiar un poco, no? Como que quiera hacer otra cosa. Que linda el agua, linda el agua, linda... lindos los patos... Dónde están los patos? Eh pato! Puedo ser una persona más alegre, más tranquila, menos neurótica, puedo ser feliz. Si.) Estoy cómoda en ésta secuencia, sola en el parque. Creo que estoy bien, me siento bien conmigo misma. Eh... (No estoy bien conmigo misma, no gusto de mí, no gusto de mí.) ¡Hijo de puta, lo agarré! Estar al aire libre es una poronga, está lleno de mosquitos boludo. ¿Vos viste cuando me quiero hacer la revolucionaria? Y me fui al parque. Me cago en mi misma y en querer cambiar. (Tengo que cambiar, tengo que ser menos soberbia, menos egocéntrica, menos egoísta... tengo que ser menos conchuda.) Nada peor que gordas caminando, dale, tipo si querés adelgazar corre hija de puta o cerra el buche. (Podría intentar ser un poco menos prejuiciosa, ser un poco menos, un poco menos... )No me parece que los viejos tengan que andar en lomo, no me parece. No quiero ver hombres con tetas, no quiero. (Un poco menos asquerosa, menos superficial, menos concheta. Así soy... soy una resentida, soy una mal cogida... soy todo eso... soy todo eso.) Ya está, tengo el dengue boludo ya fue, tengo el dengue en todo el cuerpo, chau olvidate, olvidate que tengo el dengue eh, lo re tengo boludo. (Una persona más tranquila, una persona más relajada, que digan: ‘que buena que es ella’, ‘que buena que es esa mina’.) Tenía que ser una mina, tenías que ser una mina, después por eso nos putean, la concha de su madre. (Menos agresiva, menos violenta, como una mina copada, una persona copada, una persona tolerante.) Manga de trolos. Ah, balizas no, no? Manejes, manejen. ¡Maneja puto, maneja! Yo era un ser feliz, que jamás se había enamorado, era un ser feliz que, que, que nunca había sufrido un ‘no te quiero más’. Y estaba buenísimo, la impunidad, el poder...
- HE: Amo que te de frío cuando hace 20 grados, amo que te lleve una hora y media pedir un sándwich, amo la arruga sobre tu nariz, cuando me miras como si estuvieses loca.Amo que después de haber pasado el día contigo todavía pueda oler tu perfume en mi ropa, y amo que seas la última persona con la que quiero hablar antes de irme a dormir en la noche, y no es porque me sienta solo y no es porque sea año nuevo. Vine aquí ésta noche porque cuando te das cuenta de que quieres pasar el resto de tu vida con alguien quieres que el resto de tu vida empiece lo más antes posible.
- SHE: Ves? Esto es típico tuyo, Harry. Dices cosas así y haces imposible que te odie... y yo te odio, Harry de veras, te odio...
‘Haber sufrido por amor te deja jodida’. El no haber sufrido nunca por amor es como vivirlo duro. Es como estar de merca toda la vida. ‘Pero no haber sufrido por amor es no haber sentido una mierda toda tu vida’... tengo que dejar de ver esa película.
   ¿Cuando volverás a ser      
lo que no fuiste nunca?
Te diría tantas COSAS que no puedo decir con PALABRAS; Cada vez que no puedo decir lo que siento me quedo MUDA, tal vez es lo mejor, a veces es más claro un gesto que una palabra. A veces los gestos son más tercos que las palabras, uno puede cerrar la boca, pero enmudecer el cuerpo es casi IMPOSIBLE; Salvo pequeñas excepciones, claro. Salvo que te paralicen el cuerpo con un gesto tan implacable que te dejen durísimo. Tan duro como yo ahora, que TE BESARÍA & solo así podría decirte lo que siento por VOS. Y a veces los gestos son tan claros que nos dejan MUDOS; Casi con la boca abierta. 

Todo sigue igual, todo sigue igual de bien, siguen los amigos que quiero tener, no me puedo quejar, algunas chicos me van a atender en esos momentos que no aguanto mas,me pueden conformar.
Hago lo que quiero hacer y no me sale mal, algunas cosas me toco perder y otras pude ganar, tengo la banda que quiero tener y mas de una razón para pensar que todo sigue igual.
Cambiar no cambio nada, llegando hasta donde hoy llegue, todo esta como estaba, todo esta igual de bien.


Busco a alguien que me quiera, que me sepa comprender, que me conozca realmente como soy, y que aún así me llegue a querer. Alguien que me acompañe en la risa y en el llanto.
Alguien que me haga sentir lo que valgo, lo que es amar.
Alguien que llegue a conocerme debajo de este disfraz, que sepa mis frustraciones, que viva mi soledad.
Alguien que entienda mis penas o mis ganas de reír.
Alguien que me consuele y me de ganas de seguir.
Necesito a alguien que me brinde compañía, alegría, amistad. 
Alguien que en mí confíe y que me enseñe a confiar. 

Tal vez suene egoísta, pero quiero a alguien para mí, que me de todo su tiempo y que me enseñe a vivir.


Tú me hiciste insegura
Me dijiste que no era suficiente buena 
pero ¿quién eres tú para juzgarme? 
Cuando NO eres un diamante en bruto
Estoy segura de que tienes algunas cosas
que te gustaría cambiar de ti
Pero cuando se trata de mí
No quisiera ser alguien más

BARILOCHE ♥



No quiero un hombre de cuento; 
No busco a alguien perfecto; 
Quiero algo natural, alguien que sepa amar.
Que me intoxique con amor el cuerpo; 
Que me envicie con cada beso y me enamore hasta los huesos. ♥